Las excusas que este año ya no te salvarán

«El sector de la belleza está muy tocado».

«La economía está fatal y la gente recorta». «Mis clientes han distanciado las visitas al salón». «No me da tiempo a ser empresario y peluquero a la vez».
Hay muchas más, pero esta última es de mis favoritas. Podría entender que no te diera tiempo a ser fontanero y peluquero a la vez, pero hacer que el negocio funcione, es decir, generar ingresos sin estafar a nadie va implícito en tu título de profesional de la peluquería. 
A veces es tan sencillo como hacer bien tu trabajo. Pero bien de verdad y no me refiero a cortar sin trasquilones como ya te he dicho en otras ocasiones. Me refiero a asesorar, a ser capaz de hacer aquello con lo que el cliente sueña pero que no cree posible. 

Eso es generar ingresos sin darte cuenta.  
Eso es ser empresario y peluquero a la vez. 

Está claro que la gestión de un negocio es mucho más compleja, pero si por lo memos cubres sin enterarte una da las cosas que te puede quitar el sueño, será más fácil ocuparte del resto de las tareas. 
¿Y por qué cortando bien el cabello vas a ganar más dinero? Es cierto que cobrarás lo mismo lo hagas bien o lo hagas mal, pero si consigues dejaral cliente satisfecho, estará más receptivo cuando le propongas servicios adicionales, te recomendará a otros clientes y volverá a pedir cita en tu salón. 
Y ahora dirás, ¿y cómo se hace eso?  
En primer lugar, dejando de excusarte en todo lo que se te ocurra y después haciendo clic en el siguiente enlace porque justo ahí, en mi Masterclass Particiones en Peluquería: Transforma tu Técnica de Corte te explico con detalle por dónde empezar, cómo visualizar y qué procesos elegir para hacer que tus servicios sean realmente satisfactorios. 

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